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Cuesta no asociar el nombre de Marcelo Zwicker cada vez que se habla de Unión. Cuatro años duró el exitoso ciclo del entrenador marplatense en el modesto equipo de la ciudad que fue escalando en el ascenso del fútbol argentino y hoy está nada menos que un escalón debajo de la Primera B Nacional.
El “Gancho” Zwicker, entrenador marplatense surgido en Kimberley y que luego pasó por Cadetes de San Martín como referente en el proyecto liderado por Juan Esnaider, llegó a Unión para la temporada 2008/2009 y en su primer año logró el ascenso. Luego siguieron tres temporadas con distintos matices en el Argentino A hasta que luego de la última, el técnico determinó que su ciclo estaba cumplido y dio un paso al costado.
Varios días después, Marcelo Zwicker (ex jugador de Kimberley y San José entre otros) repasó su proceso con El Atlántico, destacó su aprendizaje como entrenador y habló de su futuro.
“Han transcurrido unos días y a medida que van pasando las horas a uno se le va el dolor de la decisión tomada. Fue una decisión acertada, para mi, inteligente. Los ciclos se cumplen. El dolor pasó por los cuatro años de trabajo interrumpidos y desgastantes porque estábamos inmersos en un torneo que genera desgaste emocional, psicológico, más allá de los kilómetros que uno recorre. Uno va sufriendo desgaste, los ciclos se van cumpliendo. Una vez que me tomé esos días en soledad me di cuenta que el ciclo se había cumplido”, soltó el “Gancho” en el inicio de la charla.
- ¿Los malos resultados del último torneo aceleraron el final del ciclo?
-Sí, en la fase regular tuvimos esos baches pronunciados de los que no podíamos salir. Pero esta última parte del torneo, en el Endecagonal, los resultados adversos a veces desgastan. Yo lo venia analizando. Creo que fue la mejor decisión para todos. Y que los dirigentes tengan la posibilidad de ir a buscar otro proyecto, nuevas ideas que les pueda dar otro entrenador.
-¿Qué te dejaron estos años en Unión?
-Muchísimo. Como entrenador, he crecido a pasos agigantados. Un determinado planteo táctico del rival, hace que en la toma de recaudos, vayas creciendo, analizando, viendo diferentes posturas de otros entrenadores que uno va asimilando. Este año hemos tenido la posibilidad de que el torneo se hizo más amplio, hemos ido a jugar con equipos de muchísima historia. Para uno, es un aprendizaje constante. Para cualquier entrenador en el mismo torneo durante tres años seguidos, te hace crecer a pasos agigantados.
-¿Es una cuenta pendiente no haber podido repetir en el Argentino A lo que mostraron en el B?
-No lo pudimos llevar a cabo. Nosotros en el B jugábamos con un doble volante central y dos enganches por los costados. Y el 4-4-2 es un sistema que acá se impuso en demasía, entonces cuando liberábamos los enganches por momentos nos doblaban los laterales. Tuvimos que recomponer una idea, ir más por detrás del 4-3-1-2 o del 4-4-2. A través de haber modificado una idea y del escalón tan grande que hay entre una categoría y otra, fue muy difícil volver a plasmar lo del Argentino B. Pero creo que el año pasado a veces lo pudimos hacer. Por momentos el equipo encontró la pendiente más alta después receso y en el Nonagonal encontramos un punto muy alto. El equipo tenía una identificación. Pero en los cuatro años, lo mejor fue el período de ascenso y lo del año pasado.
-¿Te obligaron a cambiar tu forma del ver el fútbol estos años en el Argentino A?
-No, no. Sigo pensando de la misma manera. Para mi es importante preparar un equipo para protagonizar. Si podés protagonizar, para qué vas a esperar. Lo que tenés que lograr es que ese mensaje vaya a los protagonistas que son los jugadores, y tener un equipo físicamente apto. Hay veces que la idea se puede llevar a cabo, hay otras que no. En el fútbol, todo es relativo, hay matices. Pero la idea mía es que a través de la posesión y la tenencia, el equipo vaya a jugar lejos, al campo rival.
-¿Sos mucho mejor entrenador que hace cuatro años?
-Yo creo que sí. Pero a veces los resultados mandan. Uno crece para pararse adelante de un grupo, para no flaquear a la hora de tomar decisiones. Uno en la misma competencia va tiendo roces con jugadores que a veces no los tenia en cuenta y empieza adquirir un manejo grupal que no tenia. Lo que me pasó este año de haber perdido seis partidos seguidos, no me había pasado nunca. Y eso me hizo crecer, enfrentar al grupo y exponer determinadas cosas. A veces no es necesario cuando el jugador está golpeado anímicamente, empezar a revolear cosas en un vestuario. Esas pequeñas cosas a uno lo hacen crecer. Porque cuando ganás y jugás bien, está todo lindo, pero cuando te tocan momentos adversos como los de este torneo, son cosas que me han hecho crecer y me las guardo para mí.
-¿Cuesta llegarle a un grupo, sobre todo cuando es tan heterogéneo con jugadores de distintos lugares?
-En ese sentido, hemos tenido suerte. Estuve en un club que nos dio todo: estructura de trabajo, seriedad dirigencial. Entonces, cuando uno levantó el teléfono para seducir a un jugador, uno después quedó bien porque cumplió. A partir de ahí, se arma una buena comunidad con el jugador. Hemos tenido la suerte de tener jugadores muy profesionales, con una predisposición al trabajo muy grande. Todos los años. Quizás tenga todavía una materia pendiente, que sería enfrentarme a un grupo rebelde, con complicaciones, o que se me plante. Hemos tenido suerte en ese sentido.
-¿Qué es lo que tratarías de no volver a hacer?
-Quizás no traer jugadores que no haya enfrentado o convivido. Iría mucho más a lo seguro, y si no está esa opción, nada, me quedo con lo que tengo. Eso es lo que uno se reprocha y en la autocrítica que se va haciendo día a día es mas profundo. Es el punto en cuestión.
-¿Cómo proyectás el futuro?
-Tranquilo, estoy disfrutando un poco de la familia, porque estamos en una “locura” que propone este torneo y uno lo toma con un profesionalismo y adrenalina muy grande. Ahora hay que esperar que llegue alguna propuesta, si es de torneo Argentino A mejor porque uno tiene una información muy grande. Pero no se me caería ningún anillo de ir a un Argentino B a un equipo que quiera ser protagonista. Hay que estar atentos a la propuesta que salga. Sé que me tengo que ir de Mar del Plata, lo tengo asumido y consensuado y creo que si me voy, voy a seguir creciendo como entrenador porque voy a convivir con otras cosas que uno acá en Mar del Plata las tenia muy fáciles.
-¿Crees que tu lugar está en estos torneos o volverías a coordinar un proyecto formativo como ya lo has hecho?
-Sí, me gusta. Estoy abierto, la etapa formativa fue algo muy importante para mí, tanto en Kimberley como en Cadetes. Pero para coordinar y hacer algo importante, tiene que haber una estructura sólida.
-Este buen ciclo en Unión, te posicionó en el mercado.
-Sí, lo mismo le pasa un técnico que está cuatro años en un lugar y le van bien las cosas. Uno ha hecho buenas migas con algunos entrenadores de la divisional o dirigentes y sé que el nombre ha trascendido y uno ha ganado un lugar. En caso de que tenga una propuesta, habrá que analizarla y tratar de hacer el mismo trabajo o mejor que el que hicimos acá.
-¿Te costaría adaptarte a un club con problemas de los que suele haber en estas divisionales?
-Sí, lo sé a eso. Uno tiene que estar mentalizado que si quiere seguir en el fútbol de ascenso, tiene que ir a luchar con determinadas cosas. Convivir con una anomalía en los pagos o en los elementos de trabajo. Son cosas a las que uno se tiene que ir acostumbrando y mentalizarse en que tan bien como en Unión, no vamos a estar.
El futuro de Unión
Más allá de que todo hace pensar que continuará en el Argentino A, el futuro de Unión es incierto. Poco antes de la eliminación en la última temporada, el principal dirigente, Francisco Paganoremarcó la posibilidad de dar un paso al costado, cansado principalmente por los costos que exige el certamen.
Marcelo Zwicker dio su opinión al respecto y comentó lo siguiente: “Hay un poco de incertidumbre por lo que genera hacer le frente al torneo nuevamente pero creo que van a hacer fútbol porque “Cacho” es un dirigente futbolero que lo lleva en el alma y creo que en pocos días se va a dilucidar esa incógnita y no tengo dudas de que va a tratar de hacer las cosas lo mejor posible”.
El punto alto
El ascenso. Fue conseguido con un equipo genuino de jugadores de la ciudad. Encontramos en muchos un rendimiento máximo que en forma conjunta, se llegó a un objetivo de máxima que era el ascenso directo. Tuvimos rendimientos muy altos en todos los sectores de la cancha. En cinco delanteros juntamos casi 50 goles, eso fue muy importante para conseguir lo que se consiguió, para que el equipo pudiera tener un volumen de juego. Mar del Plata vio un equipo que es muy difícil poder ver en un torneo de ascenso.
El punto bajo
Lo de este año. Nunca me pasó una racha de seis partidos perdidos. Tuvimos una ineficacia en el arco rival, se trabajó, se buscaba la forma y no lo pudimos conseguir. El punto más bajo a lo largo del año fue ese. Eso hizo que nos costara mucho todo, que no hiciéramos pie en los partidos. Y algunos jugadores que no han tenido los rendimientos del año pasado y otros de los que hemos traído no han estado a la altura de las circunstancias. Fue el año más flojo. El de mayor desgaste. Lo hemos sufrido al año.
LOS NÚMEROS
Argentino B 2008-09
LOCAL: 13G / 3E / 1P / 38GF / 13GC
VISITANTE: 5G / 5E / 6P / 23GF / 26GC
Formación base: Aldo Suárez; Mariano Felices, Juan Di Bartolo, Pablo Di Bártolo y Cristian Castagnino; Federico Moreira, Damián Luengo, Esteban Alioto y Alejandro Aguirre; Franco Vóttola y Leonardo Serfaty.
Argentino A 2009-10
LOCAL: 7G / 3E / 6P / 24GF / 24GC
VISITANTE: 3G / 5E / 7P / 18GF / 33GC
Formación base: A. Suárez; P. Di Bártolo, J. Di Bártolo, Ramiro Jorge y Castagnino; Jesús Collantes, Luengo, Alioto y Moreira; Miguel Alba y Serfaty.
Argentino A 2010-11
LOCAL: 12G / 5E / 2P / 36GF / 11GC
VISITANTE: 3G / 7E / 9P / 19GF / 32GC
Formación base: Mauro Beltramella; Emanuel Urquiza, Jorge, Facundo Vega y Diego Fraire; Santiago Sandoval, Luengo, Juan Alessandroni y A. Aguirre; Matías Arrúa y Gonzalo Klusener.
Argentino A 2011-12
LOCAL: 5G / 6E / 5P / 18GF / 16GC
VISITANTE: 6G / 2E / 8P / 16GF / 23GC
Formación base: Suárez, Laureano Tello, Marcos Lamolla, F. Vega y Guillermo Aguirre; Martín Seri, Luengo y A. Aguirre; Ezequiel Ceballos, M. Alba y Álvaro Klusener.
Debut: sábado 27/09/08 Unión 1-1 Racing (O), por Argentino B. Gol de Vóttola en el “Celeste”.
Despedida: miércoles 23/05/12 Unión 0-2 Racing Cba. por Argentino A
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