miércoles, 7 de marzo de 2012

abrochó la clasificación

Unión ganó anoche su partido más importante en lo que va de la temporada. El que marcará el rumbo de acá en adelante. El que le permitió, como mínimo, asegurarse un lugar en la categoría, y que lo pone dentro del lote de once equipos que buscarán el ascenso directo a la Primera B Nacional de fútbol.
El partido de ayer fue una síntesis del torneo. El conjunto marplatense jugó bien por momentos, pero dejó crecer a un rival inferior en otros. Hizo los méritos suficientes, pero sufrió hasta el minuto final. Pero eso poco importará en el futuro. Lo fundamental es que Unión cumplió su objetivo: superó como visitante a Huracán de Tres Arroyos, por 2 a 1, y clasificó al endecagonal del Argentino A.
En la primera mitad la visita ya mostró que había cambiado respecto al último partido. Ordenado y mucho más preciso con la pelota, logró imponer la superioridad individual de sus futbolistas. Los del mediocampo jugaron a uno o dos toques (casi siempre entregando la pelota a un compañero) y Alejandro Aguirre fue un socio ideal de Miguel Alba por izquierda. El ex Chacarita no sólo mostró su habitual repertorio de velocidad y habilidad, sino que eligió bien la mejor opción, con pases punzantes cuando la jugada 'lo pedía'. Ezequiel Ceballos sin estar "fino" como otras veces, se mostró incisivo para pedir la pelota y desequilibrante con su pique corto.
Unión, encima, logró desnivelar rápido en el marcador. A los 10' "Trapito" se escapó por derecha y metió un centro que no llegó a conectar Alba, pero sí de cabeza Alejandro Aguirre por el segundo palo -el arquero dudo en la salida-.
A todo esto, Huracán fue un cúmulo de nervios e imprecisión. Empujó más cuando recibió el impacto, pero no encontró espacios ni supo cómo generarlos en los últimos metros, más allá de la voluntad de sus delanteros.
Sin pasar zozobras atrás, con paciencia y justeza en el traslado -apartado en el que creció la tarea de Manuel Berra-, buenas sociedades por las bandas y cambio de ritmo en la zona de definición, el equipo marplatense justificó la ventaja en la etapa inicial.
Lo que construyó el equipo de Marcelo Zwicker se esfumó a los 5' del complemento. Gastón Gallo intentó enviar un centro que salió al arco y Aldo Suárez increíblemente falló en el cálculo y la pelota se le metió por el primer palo.
Unión se sintió tocado por el gol, pero el desconcierto duró poco. Porque en una réplica letal, a los 11', Alba le ganó la posición a su marcador y definió ante la salida del arquero.
Después, el celeste le bajó el ritmo al trámite. Huracán tuvo más la pelota, pero no logró quebrar el cerrojo visitante y se reiteró en centros bien despejados por los centrales (muy buen trabajo de Marcos Lamolla cuando se lo exigió vía aérea).
La visita jugó como una final y ganó bien, pese a no sobrarle demasiado. Ahora comenzará 'otro' campeonato. Rivales de mayor fuste, viajes más largos, menos tiempo de descanso, poco margen de error. Unión ya demostró sobradas veces que puede estar a la altura.

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